encuéntrame

Búscame donde quieras, y encuéntrame donde te deje, quizá nos equivoquemos, tal vez se nos escapa el aire, el aire que se me va cuando esbozas una sonrisa cortando el viento que pasa y me revuelve el pelo, y tus manos agarrando suave las mías, y las mías que te sorprenden por la espalda, y voy acumulando deudas con tu pecho cada madrugada, y deudas con tu cintura, y más deudas que no puedo nombrar, estoy fotografiando un plan, lo imagino en mi mente y me estremezco, porque te imagino a ti, y ya lo tengo todo pensado, tu solo tienes que firmar con tu dedo índice en la hebilla de mi cinturón, no voy a saldar las deudas con tu espalda, para ir acumulándolas, voy a tenerte por encima de posibilidades, para pagarte con mi tiempo y tener que quedarme siempre, piénsalo, tal vez tu ganes más que yo.

 Y grietas en la carretera que parece que trazan el camino a seguir, el camino hasta la luna en la que se convierte tu sonrisa, y se te achinan los ojos, te escondes detrás de tus manos, e iniciamos una guerra que se pierde en el eco de las risas, en el eco de un silencio que nos invade cuando no nos queda nada que contar, y decidimos contar estrellas, o contar los pétalos de jazmín que ha arrasado el viento, y tu silueta de arena en las sombras de un ático, a través de un cristal, vestida, pero mi mente te desnuda, o tal vez te desnudes tú para que no pueda dejar de imaginarte, y de imaginarme contigo, y robarle a mis sueños la vida para dártela a ti, y que hagas con ella lo que puedas, y saquearme los sentidos, que no es lo mismo verte desde abajo que verte desde el cuello, ni escucharte desde lejos, que escuchar tu corazón acelerarse porque se acelera el mío, y podría darte mil motivos más y escribirte incontables cartas de amor, pero voy a dejar que te acerques tú, y me lleves contigo, así sin más.